Fantasmas de merengue

octubre 22, 2017

Cuando publiqué la entrada de la Lemon pie comenté que colgaría una versión para Halloween. Lo que he hecho esta vez ha sido cubrir las tartaletas con merengue, alisar la superficie y dejarla sin quemar. Para adornarlas usé unos fantasmas hechos con merengue suizo.

Los fantasmas se hacen formando unos montoncitos de merengue y horneándolos a fuego suave. Luego les pintaremos unos ojitos con chocolate y ya tenemos unos simpáticos fantasmas que se pueden comer.


Ingredientes:
  • 1 clara de huevo.
  • Azúcar: el doble del peso de la clara.
Elaboración:
  1. Pre-calentaremos el horno a 90º C.
  2. Pondremos en un cuenco al baño María las claras de huevo con el azúcar e iremos batiendo con unas varillas hasta que el azúcar se disuelva. Si tenéis un termómetro controlaréis que no sobrepase los 60º C para que no se cuaje el huevo. Sabréis que el azúcar se ha disuelto por completo tomando un poco de clara entre las yemas de los dedos, no tenemos que notar el azúcar.
  3. En este momento sacaremos las claras del baño María y las montaremos bien firmes con unas varillas eléctricas.
  4. Colocaremos el merengue en una manga pastelera con una boquilla lisa. Formaremos montoncitos terminados en pico sodre una bandeja con papel de horno o sobre silicona.
  5. Coceremos los merenguitos en el horno a 90º C durante 60 minutos.
  6. Cuando los saquemos del horno y se enfríen les pintaremos los ojos con chocolate fundido.

Un cuento:
Nada más adecuado para Halloween que un cuento sobre el Coco. "El Coco" es un relato que aparece en una recopilación de cuentos que Stephen King publicó en 1978. Fue su primera recopilación de relatos y se considera la mejor de ellas.

El coco es un ser con el que los padres amenazan a sus hijos cuando no quieren dormir. Como este ser no tiene género o forma específica Stephen King lo denomina "Eso". Pues sí, por lo visto este relato es precursor de lo que luego sería "It" y ya os digo que, leído en condiciones adecuadas, da mieditis.

El protagonista del cuento es Lester Billings, un hobre misógino, racista y cobarde a quien "El coco" arrebata sus tres hijos. 

"- ¿ Quién mató a los niños? -preguntó Harper.

 - El coco -respondió inmediatamente Lester Billings-. El coco los mató a todos. Sencillamente, salió del armario y los mató. -Se volvió y sonrió-. Claro, usted cree que estoy loco. Lo leo en su cara. Pero no me importa. Lo único que deseo es desahogarme e irme."
Una canción:
Buscando información sobre el cuento de King y sobre El coco, he dado con una conferencia de Federico García Lorca en la que hablaba sobre las nanas infantiles. Es una conferencia muy interesante y, en cierto modo, bastante sobrecogedora. 

Sobre el coco García Lorca dijo en aquella conferencia:
"La fuerza mágica del "coco" es precisamente su desdibujo. Nunca puede aparecer, aunque ronde las habitaciones. Y lo delicioso es que sigue desdibujado para todos. Se trata de una abstracción poética, u, por eso, el miedo que produce es un miedo cósmico, un miedo en el cual los sentidos no pueden poner sus límites salvadores, sus paredes objetivas que definen, dentro del peligro, de otros peligros mayores, porque no tienen explicación posible. Pero no hay tampoco duda de que el niño lucha por representarse esa abstracción, y es muy frecuente que llame "cocos" a las formas extravagantes que a veces se encuentran en la Naturaleza. Al fin y al cabo, el niño está libre para poder imaginárselo . El miedo que le tenga depende de su fantasía (...)"
En esta conferencia aparece una nana que Ana Belén recogería en su disco de canciones de 1998 "Lorquiana". No es sobre el coco, pero es triste y cruel. 

Nana sevillana.



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